Polenta costillas y salchichas

Nos acercamos al fin de semana con una receta muy festiva y muy clásica de Italia y que se sale de la típica pasta y pizza a la que tanto estamos acostumbrados. Este plato de Polenta, costillas y salchichas lo probé en Roma, en un restaurante en el Trastevere, llamada Trattoria da Augusto. Es uno de esos sitios donde sólo te ofrecen los 4 platos que tienen del día (yo pedí todos ;)) y que tienen un ambiente casero y cercano.

Para preparar esta receta es imporanta haber preparado primero la passata de pomodoro que os enseñé a hacer el otro día. También tenéis que haceros con una buena polenta. Como sabéis la polenta es una harina gruesa de maiz que se cuece durante largo tiempo y se toma como una especie de puré de patatas. Si queréis ahorraros tiempo, podéis comprar la polenta instantanea, que es la que yo uso.

Tradicionalemente la polenta con costillas y salchichas se sirve directamente sobre la mesa, en el centro. Se coloca primero la polenta y luego la carne con su salsa encima. Todos los comensales, con su cuchara, comen directamente de la mesa. Es muy divertido! Para emular un poco esa sensación, yo la suelo servir sobre una tabla de madera. Os recomiendo que lo probéis, a vuestros invitados les encantará!

Para hacer polenta, costillas y salchichas:

Ingredientes para 4 personas

500 gr de harina de polenta

400 gr de costillas de cerdo

8 salchichas frescas

900 gr de pasatta de pomodoro

1 cebolla

1 tallo de apio

1 zanahoria

1 vaso de vino tinto

Aceite de oliva virgen

Sal

Queso parmesano o pecorino rallado

Agua

Para el guiso de costillas y salchihcas

1. En primer lugar picamos la cebolla, la zanahoria y el apio.
2. En un caldero doramos las salchichas con un poco de aceite de oliva y reservamos (yo me olvidé y las doré despues en una sartén).
3. Seguidamente doramos tambien las costillas y las reservamos.
4. Sofreimos las verduras con un chorro de aceite de oliva.
5. Volvemos a añadir las costillas, damos un par de vueltas y agregamos el vino y la passata. Dejamos cocinar a fuego bajo durante una hora y media o dos, mejor.
6. Pasado el tiempo, sazonamos y comprobamos la textura de la salsa. Si está muy liquida, dejamos
   cocinar un rato más. Por otro lado, si está muy densa, podéis agregar un poco de agua.

Para la polenta

1. En otro caldero ponemos a hervir 1 litro de agua y añadimos sal.
2. Cuando esté hirviendo agregamos la polenta. Si es instantánea, bastará con hervirla 5 minutos a fuego medio y removiendo de vez en cuando. Si es polenta tradicional la deberéis cocer por lo menos 50 minutos.
3. Servís la polenta sobre una tabla de madera y sobre ella el guiso de costillas y salchichas.
4. Termináis con queso rallado por encima y a disfrutar!!!